Inauguración de Katia Alavedra-Duchoslav (3 sep. 2010)
«¿Nostalgia?» refleja el sentir de Katerina Alavedra-Duchoslav: unos sentimientos que ella plasma con finura maestra en su pintura. En la Sala Rusiñol nos dimos cita amigos y admiradores de esta artista: conocimos más de cerca su vida -con sus episodios dramáticos, desde la lejana Checoslovaquia del ’68- y entendimos su obra: un pasado que no se borra, un presente lleno de esperanza y equilibrio…
El director de la Sala Rusiñol, Ignasi Cabanas, nos saludó recordando que para nuestra Sala empezaba una «temporada distinta»: la de los 25 años. Hizo la presentación de Katerina -Katia para los amigos- que exponía con nosotros por tercera vez. En resumen: «Una pintora que con su estilo propio, cada vez se afianza más».
Pep Blanes, artista «sancugatenc», gran dibujante, buen amigo y conocedor de Katia (desde hace 30 años). Blanes centró su intervención en la persona de la artista. «¿Quién es Katia? Es la protagonista del guión de una «película» hecha persona». El guión es extraordinario: desde la escenografía incomparable de la convulsionada Praga de los ’60, pasando por la huida a Suiza donde despierta su inclinación por el arte, llegando a Sant Cugat del Vallès. Aquí es donde se ha consolidado su equilibrio, como un «triángulo»: su marido -Manuel-, sus hijos y el arte…
«¡Pep Blanes me lo ha puesto difícil!». Josep Mª Cadena retomó la imagen del «triángulo» para llevarla más allá: Katerina ama la belleza, una belleza hecha de armonía, como la del triángulo. Pero un triángulo «equilátero», en el que los tres puntos angulares son iguales porque ha aunado sus tres amores. Ese triángulo mueve a la persona y se refleja en su pintura. «¿Nostalgia? Creo que sí y que es útil: significa el deseo de retorno. No es la nostalgia del pasado parado, sino la nostalgia que avanza (en las personas, en los edificios…)».
Katerina Alavedra-Duchoslav tuvo unas palabras de agradecimiento hacia sus amigos y quienes la acompañábamos en la inauguración: «Me siento muy bien con vuestra presencia». Dedicó la exposición a su madre, recientemente fallecida. «En estos momentos siento la compañía de mis amigos y familiares de Chequia».
Ignasi Cabanas, al final de vernissage, nos anunció que para el próximo día 16 de septiembre, a las 11:00 h., está programada en la Sala Rusiñol una visita de la exposición guiada por la propia autora, Katerina.
MÁS FOTOS DE LA INAUGURACIÓN